CARÁCTER PROPIO

IDENTIDAD

NUESTROS CENTROS SON CATÓLICOS

  1. En colaboración con los padres promovemos la educación integral de los alumnos de acuerdo con una concepción cristiana de la persona, de la vida y del mundo.
  2. Nuestro Centro es un Centro de la Iglesia Católica. Como comunidad cristiana educativa formamos parte activa de la Iglesia diocesana y local. Participamos en las tareas apostólicas a fin de extender el Reino de Dios y hacer visible la unidad de la Iglesia.
  3. Para nosotros, Jesucristo es la figura clave de la Historia de la Humanidad. Dar a conocer su vida, su mensaje, su misión..., es nuestra tarea esencial en orden a educar a la persona en su dignidad y orientarla hacia la plenitud del Hombre Nuevo.
  4. En el horizonte del ser humano está Dios. Por eso optamos por una formación abierta a la trascendencia que ayude a los alumnos a interrogarse sobre el misterio de la propia vida y a descubrir el destino de su existencia.
  5. La enseñanza religiosa escolar forma parte de la educación en la fe. Será impartida con gran calidad dentro del horario escolar.
  6. Pretendemos además:
    • Crear un ambiente que propicie el testimonio y la acción evangelizadora de los alumnos y les oriente para la inserción y el compromiso en movimientos y servicios eclesiales.
    • Que toda la enseñanza constituya un diálogo entre fe y cultura.
    • Que una serie de actividades de libre opción, entre las que se incluyen la oración y la participación sacramental, completen nuestra pastoral educativa. La dirección y organización de esta opastoral pertenecen al CARÁCTER PROPIO del Centro.
  7. Consideramos a la persona inviolable en su vida, en su libertad y en su conciencia. Impartimos una formación que haga posible, de una manera progresiva, la opción personal, libre y comprometida por la fe cristiana. Por ello propiciamos los medios para encontrar a Jesucristo.

NUESTROS CENTROS SON CARMELITAS

  1. Damos por supuesto que los alumnos han venido a nuestros Centros por la libre voluntad de sus padres y saben cual es nuestra identidad. Ello quiere decir que aceptan o respetan a Jesucristo. Su mensaje es para nosotros el mejor proyecto de existencia y en Él se enraízan los valores y el clima de nuestra educación carmelita.
  2. Reconocemos que como Comunidad Educativa Carmelita tenemos una misión peculiar e ineludible dentro del campo de la enseñanza y de la Iglesia. En nuestra tarea docente, destacamos el valor cristiano de la SENCILLEZ evangélica como estilo de vida propio de nuestra fundadora, Madre Elisea Oliver Molina.
  3. Los Centros Carmelitas fieles a su propio Carisma potenciarán en su acción educativa estos valores:
    • La convivencia fraterna.
    • La austeridad para el compartir.
    • La sensibilidad por la paz y la justicia.
    • La solidaridad y el espíritu de servicio y acogida.
    • La interioridad que propicie el encuentro consigo mismo, con los otros y con el Dios de la Historia.
  4. Nota específica de nuestros Centros es el amor y culto a María, Madre de Dios, como una característica típica de la vivencia cristiana.

NUESTROS CENTROS ESTÁN AL SERVICIO DEL PUEBLO

  1. Nos insertamos en la realidad socio-cultural del entorno, contrayendo un compromiso de servicio al pueblo como expresión concreta de la identidad cristiana y de su propia vocación evangelizadora.
  2. Nuestros Centros están abiertos a todos, en especial a los más necesitados. Rechazamos toda discriminación de alumnos por razón de clase social, raza, posición económica, creencia religiosa, afiliaciones políticas o cualidades humanas.
  3. En aquellos países donde nos sea posible, nos acogemos a la financiación pública de acuerdo con la legislación vigente, con el fin de garantizar la gratuidad de la educación y evitar toda discriminación por motivos económicos.

LA PERSONA QUE EDUCAMOS

VISIÓN CRISTIANA

  1. El ser humano es hijo de Dios y su dignidad personal merece todo respeto. Está hecho para la verdad, el amor, y la libertad, y es acreedor a que todos los ordenamientos jurídicos le reconozcan sus derechos, que comportan los correspondientes deberes.
  2. El hombre tiene derecho al pleno desarrollo de todas sus dimensiones espirituales y corporales y por lo tanto, a una educación integral. El marco básico de esa educación es la familia.
  3. 3.La persona es un ser social. Por eso se le debe formar para la justicia, la solidaridad y la fraternidad con las demás personas, de modo que ayude a la transformación de la sociedad en que vive.

VALORES Y ACTITUDES QUE POTENCIAMOS

  1. Actitud filial para con Dios que se proyecta en el amor fraterno, la esperanza y la alegría.
  2. Sentido de responsabilidad, profundo respeto a la vida, a la persona, a su libertad y demás derechos.
  3. Capacidad de autoevaluación y sentido crítico que le ayude a discernir y tomar opciones de acuerdo con los valores cristianos.
  4. Conocimiento y juicio de las realidades sociales, especialmente de las necesidades que padecen tantos hombres, cerca o lejos de nosotros, colaborando activamente, según su edad, en el necesario cambio de la sociedad.
  5. Desarrollar el espíritu de sencillez y entrega que haga posible la amistad, que supera toda actividad individualista y de competencia, tanto personal como de grupo.
  6. Favorecer un clima de amor, generosidad y gratitud que afirme el SER sobre el TENER y lleve a la austeridad, como expresión de solidadridad y modo de compartir.
  7. Orientar hacia la paz, la convivencia, la comunicación entre las personas y los pueblos, con un espíritu abierto, dialogante, flexible, ajeno a toda forma de violencia.
  8. Enseñar a buscar espacios de interioridad frente al continuo acoso de la exterioridad en que estamos metidos.
  9. Favorecer la integración de la persona mediante el conocimiento, la aceptación y la superación de sí misma.

CRITERIOS PEDAGÓGICOS DE NUESTROS CENTROS

CARACTERÍSTICAS

  1. Cultivar de forma armónica y adaptada a la edad todos los componentes de la persona humana: intelectivos, volitivos, religiosos, sociales, afectivos, físicos y sexuales.

  2. Favorecer la educación personalizada como respuesta a las posibilidades de crecimiento y maduración de cada alumno.

  3. Impartir una formación activa por la que el alumno entre en contacto con la realidad que estudia, la interprete, la cree y pueda expresarla a sus semejantes.

  4. Estimular su creatividad, capacitándole en la responsabilidad personal y de trabajo en equipo, para que realizándose, ayude a la sociedad en que vive.

  5. Formar el espíritu activo en los cambios, en la tolerancia y flexibilidad ante las transformaciones, según las exigencias de los tiempos y de los grupos humanos.

  6. Ayudar al alumno a descubrir sus aptitudes y limitaciones y ofrecer también los servicios necesarios para su orientación vocacional y profesional.

  7. Utilizar en nuestra pedagogía los medios de comunicación y enseñar a usarlos con sentido crítico.

  8. Educar para el ocio y tiempo-libre como medio de conseguir la armonía del cuerpo y del espíritu.

  9. Preparar al educando para insertase en el mundo tecnológico, con sentido cristiano de la vida.

  10. Promover un aprendizaje basado en el interés y la motivación constante, sin excluir el esfuerzo personal en el trabajo individual y de grupo.

  11. Orientar a los alumnos según sus capacidades, aptitudes e inclinaciones para realizar su proyecto de vida en la sociedad y desde ella, comprometerse en la construcción de la fraternidad humana.

  12. Buscar que el alumnado se sienta feliz en su trabajo, en las relaciones con los profesores y compañeros en todas las actividades que constituyen la vida del Centro.

COMUNIDAD EDUCATIVA

ORGANIZACIÓN

  1. Los Profesores, Padres, Personal de Administración y Servicios, Alumnos y las Hermanas Carmelitas que forman la Comunidad Educativa, participarán en sus funciones propias según las respectivas competencias y responsabilidades.
  2. Como Comunidad se compromete a una participación efectiva en la tarea educativa que invita a la responsabilidad de todos en la acción común que sea creadora de fraternidad y sirva de preparación para una convivencia social y renovada.
  3. Como cristiana inspirada en los valores evangélicos, se compromete a mantener un clima de sinceridad y libertad en la educación y crear un ambiente en el que todos, educadores, alumnos y padres puedan madurar en su fe personal y comunitaria, encontrar momentos para expresarla y dar testimonio de ella.
  4. La tarea educativa incluye la inserción activa en el entorno inmediato, cuya promoción cultural y social se debe procurar, en colaboración y coordinación con otras entidades educativas.
  5. La Titularidad del Centro reconoce a los Órganos de Gobierno del mismo las atribuciones que las disposiciones legales le confieren, dentro del respeto al CARÁCTER PROPIO que aquí se establece, y espera de ellos la más amplia y decidida colaboración, para que dicho CARÁCTER se realice en la práctica.
  6. La Congregación de Hermanas de la Virgen María del Monte Carmelo, considera a la Comunidad Educativa como el cuerpo vivo en el que tiene que cobrar forma el CARÁCTER PROPIO que se desarrolla en este documento.

PROFESORES

  1. Se reconoce, a los profesores, el derecho al ejercicio de la libertad de cátedra "dentro de los límites del puesto docente que ocupan", límites que vienen dados por las características específicas del nivel educativo en que imparten su enseñanza y por el CARÁCTER PROPIO del Centro.
  2. Los profesores, son los responsables directos de la enseñanza en el marco de las áreas correspondientes y comparten la responsabilidad global de la tarea educativa del Centro, con los demás miembros de la Comunidad Educativa.
  3. Se facilitará al profesorado los instrumentos idóneos para una formación permanente en el orden profesional, humano y religioso.

PERSONAL DE ADMINISTRACIÓN Y SERVICIOS

  1. Colaboran de manera solidaria en la marcha del Centro y se comprometen en la acción educativa que en él se realiza.
  2. Participan en la gestión del Centro a través del Consejo Escolar, u otros órganos de gestión debidamente autorizados según los diferentes países donde la Congregación está implantada, y por lo tanto se corresponsabilizan en la acción educativa global del Centro.

PADRES DE ALUMNOS

  1. Consideramos que ningún Centro educativo puede llevar a cabo sus fines sin un profundo y permanente contacto con los padres de los alumnos. Por ello procuraremos por nuestra parte ese contacto, en orden a una educación conjunta coherente.
  2. Los padres, conscientes de sus derechos y responsabilidades, precediendo a sus hijos en el ejemplo en la familia, crearán en ella un ambiente que favorezca la educación integral y colaboración con el Centro, aceptando o al menos respetando el espíritu del CARÁCTER PROPIO y participando responsablemente en la marcha y orientación del Centro.
  3. Alentamos el movimiento asociativo de los padres y deseamos que, de acuerdo con la naturaleza propia del Centro, tengan un carácter que los identifique con la línea educativa expresada en este documento, les dé la convicción de que merece la pena aunar esfuerzos para que se realice, y les lleve a comprometerse en la tarea.
  4. Estimamos que nuestra responsabilidad de educadores abarca el proporcionar a los padres la ayuda necesaria para que puedan realizar cada vez mejor su propia tarea de educadores fundamentales de la familia.

ALUMNOS

  1. El alumno constituye la razón de ser del Centro educativo. Necesita ayuda y apoyo en su proceso formativo; pero es al mismo tiempo, el principal agente de este proceso.
  2. Un deber especial del Centro es, no sólo contribuir a su formación integral, a la que tienen derecho y con las características que en este documento se señalan, sino a tener en cuenta sus peticiones, reclamaciones y observaciones.
  3. Además de la normativa vigente, para la admisión de alumnos tendremos en cuenta la línea de nuestra Congregación de estar abiertas a todos, en especial a los más necesitados.
  4. Consideramos positivo y fomentamos el asociacionismo de los alumnos, así como su participación en la vida y gobierno del Centro, en la medida de sus posibilidades.
  5. Deseamos que el alumno recuerde su etapa educativa con sentimiento positivo y le invite a mantener una estrecha vinculación con el mismo, a través de la Asociación de Antiguos Alumnos.