Proyectos

LA ESCUELA DEL BATEY LA ALTAGRACIA

Se trata de una pequeña escuela, Ubicada en el Batey La Altagracia, perteneciente a Sabana Grande de Boya, Prov. Monte Plata. Es un lugar muy remoto ubicado en el área de amortiguamiento de Los Haitises. Socialmente a años Luz de la civilización, pero geográficamente a 10 minutos de una de las vías más modernas del país: La Autovía de Samaná. A ella acuden los niños del batey la Altagracia, de B. Zapote y de la Sección los Pececitos.

Esta empobrecida comunidad, está formada por dominicanos y por descendientes de haitianos que desde la época de Trujillo fueron asentados allí. Otros son "los desalojados del Parque Nacional de los Haitises".

 

La escuela tiene dos aulas y una pequeña habitación que los profesores, en su gran empeño por aprovechar los espacios, la usan para dar clases a un Octavo curso. Impartiendo dos cursos simultáneamente por aula, y en ambas tandas (matutina y vespertina) han logrado extender la docencia desde Pre-Primaria hasta Octavo.

 

La edificación desde su inicio quedó inconclusa, sin puertas, ni ventanas. Con el tiempo se ha ido deteriorando, pues la pintura, la instalación eléctrica, las butacas, etc., se han ido dañando.

Actualmente, tenemos una edificación de blocks con aéreas sin empañetar. Consta de dos aulas y dos habitaciones pequeñas, que funcionaban, una como dirección (tapada con cartones para que el agua no entrara) y otra como depósito. Sin marcos, ni puertas, sin ventanas, que ha perdido parte de la pintura original. Con 30 zócalos y con sólo dos bombillas funcionando. Con dos letrinas sin puertas. Butacas deterioradas e insuficientes. Los maestros sin sillas ni mesas para corregir los trabajos de los niños. Sin cocina ni comedor para el desayuno escolar. Sin mencionar la escasez en cuanto a lo relativo a material didáctico, etc.

 

Ante estas circunstancias las clases se suspendían si se nublaba (en un área que por su cercanía al Parque Nacional de los Haitises, llueve casi a diario). Además, tienen que recibir clases sentados en el suelo o traer la silla de su casa y todas las demás precariedades, no sólo desde el punto de vista de la enseñanza, sino también de material de limpieza, de cocina (sin equipar).

 

Con este ambiente tan deprimente, los profesores, padres y alumnos de la Escuela, era poco lo que podían hacer…

 

Desde hace un tiempo, venimos ayudando desde la Fundación a este batey, siempre que recibimos donaciones de Instituciones (del Colegio Ntra. Sra. del Carmen de Orihuela, España), comunidades religiosas (Parroquias Francisco Javier, Jesús Cristo Sumo y Eterno Sacerdote, San Ignacio de Loyola y Santa Cecilia) y de Familias Individuales (Flia. Torres Coste, Coste Cruz, Valerio Coste, etc.). Los solemos ayudar con ropas, libros, alimentos, zapatos, cenas y regalos de Navidad y de Reyes etc.

 

Ayudamos a las familias para que puedan laborar la tierra, compartimos con ellos los frutos…, es algo importante para ellos, pero no suficiente para sacarlos de la situación de extrema pobreza en que se encuentran...

 

Un día, quiso el Señor (a raíz de las inundaciones pasadas), que con algunos forasteros que vinieron a vernos, visitamos la zona, y les ensañamos la escuela. Llevamos a una familia dominico-portorriqueña que siempre nos ayuda (la familia Torres Coste) y ellos a su vez, al regresar a Puerto Rico en donde viven, les llevaron la inquietud a amigos y compañeros de trabajo. Sensibilizados estos por tal situación nos enviaron su aporte y junto con una Institución no gubernamental que visitó la zona por las inundaciones, cambio un poco la panorámica, es decir: ya nuestra Escuela La Altagracia, tiene ventanas y puertas. Ya tenemos recursos para pintarla y poner la instalación eléctrica.

 

Nos faltarían: mesas y sillas para profesores y alumnos, estantes para los libros y material didáctico. También, poder ampliar la pequeña habitación de depósito, para formar otra aula (más bien adecuarla, pues ya la están usando como tal).

 

Decirles para terminar, que el Señor realmente “ha estado grande con nosotros y estamos alegres”: “Tenemos un nuevo Director”, un santo varón, con mucha fe y deseos de que junto con Uds. y unidos por el Señor, lograremos cambios importantes. Ha puesto a funcionar la Asociación de Padres y Amigos de la Escuela. En el ambiente y en los profesores y alumnos ya existe otro estado de ánimo, ellos consideran que con los cambios realizados se les ha subido la autoestima

 

Bueno, que el Señor los colmes de bendiciones a todos Uds., bienhechores de esta obra, y que nos aumente la Fe y Fortaleza para seguir ayudando de esta forma a la Comunidad del batey La Altagracia..

Atte.

Dra. Yoselín Coste,
Coordinadora Médica de la Fundación Ntra. Sra. del Carmen, Santo Domingo (Rep. Dominicana)

 

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Todo esto y más, sin dejar nuestro objetivo principal: PROVEER DE LECHE Y CACAO A LOS NIÑOS DEL SECTOR BRISAS DEL ESTE de Santo Domingo. En la actualidad, son 717 familias a las que ayudamos, gracias a la generosidad de muchos.

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